Cuando Dios habló al hombre humilde de Ur, eso marcó una nueva dimensión en su relación con la humanidad.
Por su inmensa gracia, Dios le hizo una promesa específica a Abraham respecto a su futuro (Génesis 12) y cuando puso esa promesa en forma de pacto con Abraham (Génesis 15-17), hizo claro a todos a través de las edades que El es un Dios fiel a su palabra. Un Dios que obra a través de su pueblo para traer su bendición al mundo que creó. Un Dios cuyo amor y misericordia son firmes, inconmovibles e insondables.
Obviamente, Abraham tenía algunas dudas, así que cuando pasaron los años y la bendición prometida todavía no daba fruto tangible, Abraham y Sara intentaron ayudar a Dios, pero los resultados de sus esfuerzos les perseguirían, a ellos y a su descendencia por futuras generaciones.
Si tan solo Abraham y Sara hubieran confiado en que Dios cumpliría lo que prometió -a su manera, en su tiempo-.
Por supuesto, ellos actuaron quizas como lo hubieramos hecho nosotros, y sin embargo, nosotros tenemos una gran ventaja sobre ellos. Ellos no tenían el beneficio del amplio relato de las actividades de Dios con la humanidad que tenemos en la Biblia, pero podemos aprender de ese relato, y confiar en nuestro Dios soberano. Sus promesas son nuevas cada mañana, y son para ti.
Toma un momento para meditar en las promesas que Dios te ha hecho a tí, que eres su hijo. Lee cuidadosamente Hebreos 8:6-12 para aprender más acerca del pacto que está vigente ahora mismo y alabálo por su amor y gracia firmes para contigo.
Como creyentes, somos hijos de Abraham y herederos de sus bendiciones, según el apóstol Pablo en Gálatas 3:6-9: "Y la Escritura, previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio de antemano la buena nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones. De modo que los de la fe, son bendecidos con el creyente Abraham".
Hijo de Dios, tú eresbendecido con Abraham y Dios quiere que seas una bendición para el mundo. ¿s tu vida un estímulo para los que te rodean (tu familia, tus compañeros de trabajo, tus vecinos)? ¿Les estás mostrando el camino a tu Dios digno de confianza?.
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