martes, 12 de enero de 2010

EL HOMBRE RECHAZA LA LUZ


La oscuridad espiritual se debe, no a que Dios retire arbitrariamente la gracia divina, sino al rechazo de la luz por parte de los hombres. El pueblo judío, al unirse devotamente con el mundo y olvidarse de Dios, ignoró la venida del Mesías. En su incredulidad rechazó al Redentor. Dios no privó completamente a la nación judía de las bendiciones de la salvación. Los que rechazaron la verdad habían hecho "de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz" (Isaías 5:20)
Despues de rechazar el evangelio, los judíos continuaron manteniendo sus antiguos ritos, mientras admitían que la presencia de Dios ya no estaba con ellos. La profecía de Daniel señalaba de manera inconfundible el tiempo de la venida del Mesías y predecía en forma directa su muerte. Por esa razón ellos se oponían a su estudio, y finalmente los rabinos pronunciaron una maldición sobre todos los que intentaron computar el tiempo. En medio de la ceguedad y la impenitencia, el pueblo de Israel en los siglos sucesivos se ha mantenido indiferente al bondadoso ofrecimiento de la salvación, sin importarles las bendiciones del evangelio, y las solemnes y terribles advertencias de rechazar la luz del cielo.
El que desprecia la convicción de su deber debido a que ésta interfiere con sus inclinaciones, finalmente pierde el poder para distinguir entre la verdad y el error. El alma se separa de Dios. Cuando se ridiculiza la verdad, la iglesia está en tinieblas, la fe y el amor se enfrían y comienzan las disenciones. Los miembros de iglesia centran sus intereses en asuntos mundanos, y los pecadores se endurecen en la impenitencia.
¿Cual fue el origen de la separación de la sencillez del evangelio? El conformarse con el paganismo, para facilitar la aceptación del cristianismo por parte de los paganos. Hacía fines del siglo II, la mayoría de las iglesias asumieron una forma nueva; la sencillez de la iglesia primitiva desapareció, y los hijos de los que habían mantenido la pureza doctrinal original, comenzaron a dar nueva forma a la causa de Cristo. Un diluvio de paganismo se introdujo en la iglesia, trayendo a esta sus prácticas y sus ídolos. La religión cristiana obtenía el favor y el sostén de los gobiernos seculares; era aceptada nominalmente por las multitudes; pero muchos siguieron siendo paganos, adorando a sus ídolos en secreto.
¿No estamos viendo lo mismo hoy en las iglesias que se dicen protestantes? Juan Wesley ya lo señalaba en su tiempo:
"No malgastes ninguna parte de tu talento tan precioso... con superfluos o costosos atavíos o con adornos innecesarios, con superfluos o costosos muebles; con cuadros costosos, , pinturas y dorados. Siempre que te vistas de púrpura y de lino fino blanco, y tengas banquetes espléndidos todos los días, no faltará quien aplauda tu elegancia, tu buen gusto, tu generosidad y tu rumbosa hospitalidad, pero no vayas a pagar tan caros tus aplausos. Conténtate más bién con el honor que viene de Dios.
El gran pecado del cual se acusa a Babilonia es que ella ha hecho que todas las naciones beban del vino del furor de su fornicación. La copa representa las falsas doctrinas que ha aceptado como resultado de su amistad con el mundo, ella ejerce una influencia corruptora sobre el mundo enseñando doctrinas opuestas a la Biblia.
Si el mundo no estuviera intoxicado con el vino de Babilonia, multitudes se convertirían por las claras verdades de la Palabra de Dios. Pero la fe religiosa parece tan confundida y discordante que la gente no sabe que creer. La iglesia es responsable del pecado de impenitencia del mundo.
Antes de la venida de Jesús, Satanás obrará con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad; y todos los que no recibieron el amor de la verdad para ser salvos, serán dejados para que reciban un poder engañoso, para que crean a la mentira. (Ver 2 Tesalonicenses 2:9-11)

Continuara...

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MENSAJE PROFETICO

"Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo esta cerca" (Apocalipsis 1:3)